Francisco J. Villanueva, víctima de torturas en Bolivia (AI)

Amnistía Internacional protesta porque se den estas prácticas en el país, así como que se admitan testimonios obtenidos bajo este trato inhumano.


Amnistía Internacional se ha dirigido a las autoridades bolivianas para presentarle las denuncias recibidas por la organización sobre las torturas que ha sufrido el ciudadano español Francisco Javier Villanueva, detenido en la ciudad de Santa Cruz el pasado 28 de abril.

Según la información recibida, Francisco Javier Villanueva fue detenido por miembros de la policía vestidos de civil y quienes sin identificarse ni presentar orden de detención le arrestaron violentamente. Javier Villanueva fue llevado a un lugar no identificado en donde durante varias horas fue sometido a golpes, inmersiones en agua, sesiones de asfixia colocándole bolsas de plástico en la cabeza, descargas de corriente eléctrica en los genitales y amenazas de muerte para obligarlo a confesar su participación en la muerte de la Fiscal Departamental Dra. Mónica Von Borries, que murió en la ciudad de Santa Cruz  el 27 de febrero de 2004,  víctima de la explosión de una bomba colocada en su automóvil.

Francisco Javier Villanueva ha denunciado las torturas sufridas y la extracción de una confesión como resultado de las mismas, ante las autoridades judiciales bolivianas incluyendo a la Fiscalía de Distrito de Santa Cruz y al Defensor del Pueblo. Copias de estas denuncias han sido recibidas por Amnistía Internacional al igual que la copia del informe médico que certifica que Javier Villanueva presentaba hematomas dolorosos en la cabeza, equimosis, excoriaciones y laceraciones en varias partes del cuerpo.

A Amnistía Internacional le preocupa que estas denuncias de tortura  no hayan sido investigadas por las autoridades bolivianas y les recuerda que la práctica de la tortura debe ser condenada sin reservas por las autoridades así como que denuncias de este tipo deben ser investigadas de forma inmediata e independiente.

La Constitución de Bolivia garantiza a todas las personas el derecho a la vida y a la integridad física; así como la Convención contra la Tortura y otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes, de la cual Bolivia es Estado Parte.

A la preocupación de  Amnistía Internacional de que estas denuncias no parecen haber sido debidamente investigadas se añade el que, según la información recibida, los cargos en contra de Francisco Javier Villanueva, quien niega haber tenido ninguna participación en los hechos relacionados con la muerte de la Fiscal Mónica Von Borries, estarían basados en confesiones extraídas bajo tortura.

Desde  el 7 de mayo de 2004,  Francisco Javier Villanueva está detenido en el Centro de Rehabilitación de Santa Cruz, Cárcel de Palmasola, en el área conocida como “Chonchocorito” en donde él afirma que su vida e integridad física corren peligro.

Amnistía Internacional ha presentado en repetidas oportunidades  su preocupación a las autoridades nacionales respecto a varias  cárceles en Bolivia, incluida Palmasola, en donde las condiciones carcelarias son crueles, inhumanas y degradantes.  Las preocupaciones de la organización  respecto a la situación y condiciones de detención en la cárcel de  Palmasola también han sido presentadas a autoridades departamentales incluyendo al Fiscal del Distrito, durante visitas de delegaciones de Amnistía Internacional al Departamento de Santa Cruz.


Amnistía Internacional, 14 de diciembre de 2004