La Primera de TVE siguió con el liderazgo, Antena 3 cambió de propiedad y Telecinco basó su éxito en una programación de trazo grueso y discutible. La 2 siguió ofreciendo irregulares destellos de luz y, entre las autonómicas, TV3 siguió haciendo una programación de éxito y distinta.
Resulta difícil sintetizar en un par de folios lo que ha sido la televisión en el 2003, pero sí es posible pergeñar una crónica de titulares, de pinceladas e impresiones.
La Primera: líder de audiencia
La vida sigue, pero TVE-1 continúa siendo la cadena líder de audiencia. La Primera continúa teniendo su principal bastión en una población envejecida, que una fuerza telúrica impide rejuvenecer.
Juan Menor lo intentó con Operación Triunfo, que ha ido perdiendo fuelle en su tercera edición, y con El show de Flo, que fue flor de primavera porque dejó la cadena pública para aparecer en el 2004 en Antena 3.
Lo seguirá intentando con Paco y Veva a partir del próximo trimestre, aunque sus principales columnas en este año que ya nos ha abandonado siguen siendo las de siempre: buen deporte; unos culebrones de acero para la programación de tarde; unos informativos controvertidos pero con gran capacidad de convocatoria; programas de corazón elegante que se permiten el lujo de no hablar, por prohibición expresa, de la familia real; un Cine de barrio que prescinde de Parada que es sustituído por Carmen Sevilla y el incombustible Noche de fiesta que sigue dando alegrías a José Luís Moreno y a TVE. Capítulo aparte para La Primera merecen las dos series que han liderado todos los prime times que han protagonizado: Cuéntame, que sigue imbatible; y Ana y los siete, que demuestra que el sentido común y la lógica no son suficientes para analizar las programaciones de televisión.
Telecinco: la cadena del “reality”
Tele 5 ha basado su año en el “reality” y en productos como Crónicas Marcianas, siempre en el filo de la navaja, protagonizando sonados escándalos que no han hecho más que engordar su audiencia día a día, batiendo a Antena 3 y situando a la cadena de Mediaset en segunda posición. Junto a la mejor temporada de Javier Sardá y sus “marcianos”, anoten esta media docena de referentes televisivos: Hotel Glam, que mereció unos sorprendentes comentarios del consejero – delegado de la cadena; Gran Hermano, que dará paso en 2004 a su edición VIP; Aquí hay tomate, que dió paso a un nuevo nivel de truculencia en la información rosa; y Salsa rosa, que es un Tómbola revisitado, nada nuevo bajo el sol. En los capítulos de calidad destaquemos C.S.I., que dió paso a su secuela de Miami.
Entre los fracasos, los constantes intentos de poner en pie un concurso para cerrar su programación vespertina, que nunca han cuajado obligando a A tu lado a convertirse en un programa chicle, que ha ido degradando también sus contenidos. Tele 5 ha seguido contando con el favor de jóvenes de clase media y urbanos que han avalado un gran éxito comercial y prestigio para sus informativos, que a pesar de su buena imagen, no consiguen salir de la tercera posición en la clasificación general. Y un recuerdo para los muertos en combate: José Couso, cámara inocente, abatido por un taque de los Estados Unidos y motivo de una gran campaña de solidaridad.
Antena 3: Cambio de propiedad y nueva etapa
Antena 3, finalmente, ha cambiado de manos en 2003. Cortejada por varios novios, Telefónica decidió que fuera el grupo Planeta – Agostini el que tomara el control accionarial de la compañía, con la complicidad forzada de RTL y BSCH. Llegó a la máxima responsabilidad Mauricio Carlotti, que decidió impulsar un polémico ERE que ejecutó centenares de despidos. Utilizó el año para mejorar resultados económicos y prometió para este enero de 2004 que ahora comienza, una nueva etapa.
De la programación de 2003 poco puede decirse: un modelo de transición, que dio muchos palos de ciego y que tuvo poca fortuna en sus resultados de audiencia, con errores clamorosos como sus intentos de ficción (Código fuego, London Street, El pantano) y algunos programas menores de los cuales ya nadie se acuerda. Sus mañanas y sus tardes siguen renqueando y sigue pendiente la gran asignatura del late night que no se ha resuelto con ninguno de los experimentos del año. Entre sus éxitos de siempre, Los Simpsons, para variar, con renovación incluída.
En el último trimestre, la programación ya apunta maneras y hace pensar que el primer trimestre de 2004 dará que hablar. Empezaron a dar frutos los contratos con las “majors” americanas que permitieron construir una programación con grandes películas con El peliculón. Se acertó con Aquí no hay quien viva, una producción de José Luis Moreno, que situó a la cadena los domingos en primera división.
Entre las curiosidades del año, el Campeonato del Mundo de fútbol, que dio días de gloria a la cadena a precio de oro. La compra de Onda Cero y la guerra de Irak acabaron lastrando los resultados económicos de la cadena y no la libraron de la tercera posición de la clasificación.
Autonómicas: TV3, la mejor. Nacen nuevas cadenas
Las cadenas autonómicas han tenido un año desigual. TV3 confirmó su liderazgo en el conjunto del año, pero los últimos meses lo han teñido de amargura con el avance de Telecinco en Cataluña. En el 2003, TVC ha sabido mantener el equilibrio que la ha caracterizado entre calidad y popularidad y ha anunciado la creación de una nueva cadena “3/24”, una “all news” que debe empezar a existir en este mes de enero con todas las consecuencias. El final de año provoca cambio de directivos y nuevas tendencias.
Asturias, Aragón y Baleares han anunciado también la creación de sendas cadenas autonómicas.
Telemadrid ha pasado del “gallardonismo” al “aguirrenismo” con Manuel Soriano, mientras que Galicia ha mejorado su financiación y Canal Sur ha estado en el centro de la batalla entre el Gobierno y la oposición de Andalucía.
Todo se mueve en el sector
En un repaso rápido del año 2003 no podemos olvidar la fusión entre Vía Digital y Canal Satélite, que provocó el parto de Digital +, y llevó la crisis a múltiples empresas que vivían de la producción de canales temáticos. Quizá el caso más público es el de Media Park, que se ha visto abocado a una difícil situación que aún no tiene solución.
El Gobierno no ha hecho tampoco los deberes en la regulación de la televisión local y autonómica, ni en la creación del reclamado Consejo del Audiovisual. Bruselas ha reclamado, una vez más, la normalización de la financiación de la televisión pública.
CLARÍN, 1 de enero de 2004