SAN SEBASTIÁN. La escuela de teatro Gaztetxo aboga por la defensa de los derechos humanos en el musical Schindler.
Los componentes de la
Escuela de Teatro Gaztetxo, perteneciente a la congregación salesiana de Intxaurrondo, se afanan estos días en la representación de su segundo trabajo, el musical
Schindler. Esta adaptación del holocausto judío no sólo pretende ser un mensaje de esperanza y paz para la sociedad, sino también convertirse en un medio con el que ofrecer a los jóvenes del barrio un espacio de reflexión y compromiso con los demás.
Los responsables del musical
Schindler no sabían hace un año, cuando eligieron el título de su próximo trabajo, que la representación de esta obra iba a discurrir en una época donde la defensa de los derechos humanos, la oposición a la guerra o el dolor de las víctimas civiles gozarían de tanta actualidad, y donde el mensaje de esperanza y paz que transmite, cobraría mayor fuerza.
«Nos decantamos por Schindler, porque su argumento está muy relacionado con nuestras vidas: la injusticia, el hambre, la opresión... Los últimos acontecimientos en Irak han sido una penosa coincidencia que afianzan los valores expuestos en el musical», expone
José Amaia, coordinador del proyecto.
Educar en valores
El éxito cosechado con la anterior obra, el musical
2.000 años después que trataba sobre la vigencia del mensaje de Jesús, animó a este grupo a continuar con la tarea teatral. La gran implicación de los jóvenes, monitores y demás voluntarios, así como el apoyo del público fueron tan altos y gratificantes que los responsables de la escuela apostaron por continuar con esta labor que ofrecía simultá neamente a los chavales un medio de diversión y de aprendizaje de los valores humanos (respeto a los demás, solidaridad...).
«Aprovechamos los temas de la obra para reflexionar sobre su relación con situaciones actuales. De esta forma, los jóvenes aprenden y analizan la importancia del respeto a la vida o la libertad de las personas y los pueblos, porque son testigos directos de las injusticias que se dan en nuestro mundo. Así, vamos creciendo en valores con ellos», asegura
José Amaia.
Junto a la defensa de los principales derechos del hombre está el objetivo de inculcar a los participantes de la obra la importancia de ser responsables y mantener el compromiso que adquiere cada uno en su vida.
«Queremos que los chavales, que la mayoría tienen entre 13 y 16 años, aprendan que si quieren salir en la obra, tienen que dedicarle tiempo, esforzarse en sus papeles y, sobre todo, ayudar a sus compañeros».
«Algunos han encontrado en esta actividad un modo de demostrarse a sí mismos y a los demás su valía. Muchos de ellos son alumnos míos en el colegio, y se ha dado el caso de personas que van mal en los estudios, pero que en la obra se han aplicado bastante. Encuentran alicientes y muestran además muchas ganas de aprender», añade.
El género, musical
Cuando se le pregunta a
Amaia cuál es el motivo que les inclinó a volver a utilizar el género del musical, lo tiene muy claro, su atractivo para los chavales.
«Hemos comprobado que el musical es la fórmula idónea para trabajar con nuestros pequeños actores. Ofrece múltiples opciones en el reparto de papeles y de que los chavales elijan un personaje en el que se sientan a gusto, además puede participar un mayor número de actores que en cualquier obra tradicional. Hay jóvenes que son tímidos para hablar en público y que se sienten incómodos interpretando, pero que se animan a bailar o a la inversa», explica el coordinador de
Schindler.
A pesar de que ninguno de los organizadores ha estudiado arte dramático, intentan esforzarse al máximo en sus tareas y aprender de otros grupos de teatro salesianos más veteranos en estas artes. Del medio centenar de personas que participan en la obra, cabe destacar el papel protagonizado por una niña vestida de rojo que simboliza la esperanza.
«Actúa fenomenalmente, es muy bonita y graciosa, pero lo que mejor hace es morirse», explica
Amaia sonriendo. La música, los cambios de luz, las intervenciones de la narradora y las proyecciones de imágenes sobre guerras o hambre refuerzan los mensajes de la obra para llegar de forma más directa al público.
Futuro
Los responsables de la
Escuela de Teatro Gaztetxo ofrecerán varias representaciones en su sede de Intxaurrondo, pero no descartan llevar su obra a otros lugares de Euskadi como Barakaldo o Azpeitia como con el anterior musical. De otro modo, apenas estrenada la obra, Gaztetxo ya tiene pensado cuál será su próximo trabajo, que será otro musical, pero dirigido a niños.
DATOS
Obra:
Schindler.
Género:
Musical.
Adaptación:
Escuela Teatro Gaztetxo.
Música:
Juan Peris.
Representaciones:
30 mayo, a las 20.00, y 6 junio, a las 20.30 horas.
Lugar:
Salón de Actos del colegio Mª Auxiliadora.
Entradas:
www.gaztetxo.com
YOLANDA SÁNCHEZ, SAN SEBASTIÁN
EL DIARIO VASCO, 29 de mayo de 2003