Los padres de adolescentes podrán averiguar con un test si sus hijos se drogan.

Las farmacias ya pueden vender un test doméstico estadounidense que detecta el consumo de estupefacientes. El sistema de detección confirma el consumo de drogas al contacto con una prenda de ropa sudada o con la orina. Los padres de los adolescentes españoles pueden desvelar en tres minutos si sus hijos han consumido drogas. Un laboratorio farmacéutico ha sacado al mercado un test doméstico que aseguran que permite averiguar mediante el sudor o la orina de una persona si ésta ha flirteado con las drogas durante la noche anterior. El producto, denominado Arifarm-Test, abre una polémica vía de control de los progenitores sobre sus vástagos en un periodo de tensión familiar por el elevado consumo de estupefacientes de los más jóvenes. Este test puede realizarse sin la participación del hijo investigado. Según el laboratorio farmacéutico estadounidense que ha fabricado el producto, simplemente es necesario que una persona coloque las tiras de detección del test sobre el sudor de una prenda de la persona que se desea investigar. Por ejemplo, la ropa que está en contacto con las axilas o la espalda. La otra opción es sumergir dichas tiras en la orina del adolescente. En ambos casos el resultado se obtiene a los tres minutos. La detección de este producto afecta a las anfetaminas, éxtasis, ácidos, speed, cocaína, heroína, morfina, opio, cannabis, marihuana y hachís. El principal foco de preocupación de los padres de adolescentes se centra en el consumo de las drogas de diseño. Las muertes de varios adolescentes en los últimos meses -dos de ellos en Barcelona- por consumo de éxtasis ha disparado la inquietud. Estos sistemas de detección -que en el caso de dar positivo recomiendan una posterior prueba analítica para reconfirmar los datos preliminares- pueden también registrar errores apreciativos. Según algunos expertos, los adolescentes que sin consumir drogas estén compartiendo el mismo ambiente con personas que, por ejemplo, fumen hachís podrían dar positivo en los test que se basan en el sudor corporal de la persona. Este producto está ya disponible en los almacenes de los mayoristas que distribuyen productos farmacéuticos. Eso significa que cualquier farmacia española puede ya comercialiar dicho test. El precio de venta es de 60 euros. En España se han registrado algunos precedentes, esencialmente en la comunidad de Madrid. El gobierno autónomo de la capital intentó poner a disposición de los padres que lo desearan unos parches que podían detectar un hipotético consumo de estupefacientes de sus hijos. El impulso de esa medida provocó que diversas ONG, sindicatos y asociaciones de padres criticaron con dureza la decisión de la Comunidad de Madrid. La protesta englobó incluso a la Cruz Roja y el aspecto central de la queja era que la medida convertía a los padres en "potenciales policías". De todos modos, el plan que intentó impulsar Madrid contaba con la participación del adolescente, algo que no ocurriría con este nuevo test. LA VANGUARDIA, 16 de julio de 2002. CUALITATIVO, NO CUANTITATIVO. Comercializan un nuevo test para detectar el consumo de drogas sin que lo sepa el consumidor. BARCELONA.- Padres y expertos en el ámbito de drogas consideran que el nuevo test que ayer llegó a las farmacias españolas para detectar el consumo de drogas a través del sudor y de la orina entorpecerá el diálogo con los hijos. El detector permite a los progenitores conocer si sus hijos han tenido contacto con estupefacientes aplicando este test en ropa sudada o sumergiéndolo en orina del consumidor sospechoso durante tres minutos. El director general de drogodependencias y SIDA de la Generalitat, Joan Colom, aseguró que este tipo de productos "no son el mejor mecanismo para conocer la realidad de nuestros hijos". "Convertir a los padres en detectives de sus hijos no es la mejor estrategia para prevenir el consumo de drogas". Colom señaló que éste no es el primer producto que llega al mercado español para detectar la existencia de estupefacientes en el organismo, aunque en este caso, a diferencia de los anteriores, "se pondrá al alcance de toda la población". Los centros de tratamiento a drogadictos ya utilizan de forma habitual un detector en orina y un parche que, aplicado en una zona del cuerpo, permite advertir del consumo de drogas. Ni cuanto, ni seguro, ni únicamente en farmacias. Por su parte, el vocal del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Barcelona en materia de drogas, Rafael Borris, señaló que este detector es "cualitativo y no cuantitativo", ya que advierte de si "se han consumido drogas" pero no de "la cantidad". Borris, que mostró sus reticencias ante el nuevo test, destacó a Europa Press la limitación de este producto, ya que en caso de dar un resultado positivo "siempre deberá confirmarse con una prueba de laboratorio". El Colegio Oficial de Farmacéuticos de Barcelona (COFB) advirtió en un comunicado que "este producto no se comercializa únicamente en farmacias sino que puede distribuirse a través de cualquier punto de venta". EL MUNDO, 17 de julio de 2002.